Cuando hablamos de las fiestas navideñas, lo cierto es que suponen un cambio radical para cualquier ciudad del mundo. Las luces y el ambiente semifestivo invita a descubrir las capitales, de una forma diferente. En el caso de Madrid, no iba a ser menos.
Si nos acercamos a pasar unos días en el epicentro español, tendremos la sensación de observar una ciudad diferente. Se trata de un ambiente que inunda calles y restaurantes de cualquier barrio, pero que también, intenta distinguirse del resto imponiendo sus modas propias.
Mercadillos navideños
Para los amantes que buscan regalos diferentes existen dos mercadillos navideños que no deben dejar escapar. El primero de ellos, se encuentra en plena Plaza Mayor. En esa zona, ya es tradición encontrar desde inicios del mes de diciembre, las casetas que venden todo tipo de productos relacionados con estas fechas.
Desde cerámicas para decorar nuestro belén, hasta piezas que engarzar en nuestro árbol, productos de pirotecnia, disfraces para los más pequeños de la casa, y algún que otro producto típico de la gastronomía de estas fechas. Se trata de una tradición para los madrileños visitar esta zona, a pesar de que siempre hay una gran cantidad de gente paseando y viendo los puestos.
Además, las luces de las diferentes calles centrales de la capital y los restaurantes y bares de la zona que invitan a pasar y huir así del frío con un buen chocolate caliente o un bocata de calamares, hacen de la visita, un completo día de celebración y de ambiente invernal.
Artistas independientes dedicados a productos singulares
El segundo mercadillo lo encontramos en la Plaza de España. Se trata de un lugar que aprovechan, desde hace varios años, para acoger una muestra de productos muy singulares venidos de toda la geografía española.
Orfebres, productos textiles, decoración, antigüedades, láminas, flores secas… Ante nosotros se abre un gran abanico de productos, que son totalmente elaborados a mano, por ello, su precio suele ser elevado. Eso sí, se trata de una de las pocas veces en las que podrán escoger productos únicos para regalar a un ser querido.
Sobre todo llama la atención temas de decoración en barro y cerámica, y productos de joyería con piedras y plata. Firmas que año tras año llegan a Madrid dispuestas a hacer caja y compensar quizá, unas bajas ventas el resto del ejercicio. Dos encuentros únicos de estas fechas que les recomendamos visiten y disfruten, al menos, una vez en la vida.