Fuenlabrada, ciudad ubicada a escasos kilómetros de Madrid, es por sobre todo un punto fijo para pasar unas vacaciones añoradas.
Dispone de numerosos lugares históricos para visitar, además de una gran cantidad de celebraciones musicales realizadas en diferentes claustros en los que es posible participar de maravillosas sesiones de jazz. El flamenco y los festivales que suscita atraen a muchos turistas.
Todos los momentos del año son indicados para recorrer Fuenlabrada, sin embargo se recomienda hacerlo del 13 al 17 de septiembre, fecha en la que se lleva adelante la fiesta del Santísimo Cristo de la Misericordia, lo cual involucra grandes ferias, espectáculos teatrales y corridas de toros.
La Iglesia Parroquial de San Estéban Protomártir, construida en el siglo XVI, es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad. En su interior es posible sorprenderse con la belleza del retablo del altar mayor.
Asimismo, las fuentes que adornan cada una de las esquinas le da un tono distinto a Fuenlabrada, casi soberbio, siendo el símbolo identitario de la localidad. Las hay de todo tipo, pero las más encantadoras son la del Botón y «El Naranjo».
Las ermitas, como la de Belén y la del Cristo de las Lluvias, son sitios que no se pueden dejar de conocer por la imponente edificación que encierran.
En la zona del casco histórico es posible visitar la plaza General Barrón, el Ayuntamiento y la reconocida fuente Cuatro Caños, considerada una reliquia del lugar.
Antes de abandonar este lugar, dese una vuelta por el centro cultural Tomás y Valiente, quedará abrumado con las obras que cobija.