Vacaciones al natural en el Embalse de Arrocampo

En las proximidades del Parque Nacional de Monfragüe, en el noreste de la provincia de Cáceres, se ubica el Embalse de Arrocampo, espacio natural protegido que integra la Red Natura 2000.

Por sus singulares características, Arrocampo es un embalse que conforma un enclave único en Extremadura, habitado por una avifauna peculiar y rara de observar en el interior peninsular. Debido a que el embalse cumple la función de refrigerar la central nuclear de Almaraz, el nivel del agua no varía sino que es constante. Por esa razón, en la mayor parte de la orilla abunda la vegetación palustre.

Por su cercanía a dos autovías, el embalse es un sitio de fácil acceso. En este caso, es interesante tomar las dos rutas propuestas por el Parque Ornitológico de Saucedilla. La primera consiste en un recorrido de aproximadamente 4 km por senderos de tierra, realizando paradas en cuatro observatorios. Se puede realizar caminando o en vehículo, de acuerdo al estado de la vía. En tanto que la segunda ruta es un corto paseo en vehículo entre Saucedilla y una balsa de riego cercana. Ambas rutas comienzan en la Oficina de Información, en el sur de Saucedilla.

En total existen cinco observatorios, aunque también se pueden utilizar las rampas de subida como mirador para avistar aves palustres, como la garcilla cangrejera, bigotudo, calamón y garza imperial, etc.

Cualquier época del año es buena para visitar Arrocampo, aunque el invierno y la primavera suelen ser considerados los mejores momentos para hacerlo.

Entre Arrocampo y Monfragüe hay una gran extensión de dehesas. Para apreciarlas mejor, lo ideal es tomar la carretera que une Serrejón y La Bazagona o alguna de las que llegan hasta Toril.

En los pueblos situados en los alrededores puede contemplarse diversas muestras de arquitectura popular y monumental, como es el caso de las iglesias parroquiales de Almaraz y Saucedilla, y el castillo de Belvís de Monroy, este último construido entre los siglos XIII y XIV.

Imagen:

Wikipedia