En la parte sur de Sevilla se encuentra el municipio de Lebrija, en las Marismas del río Guadalquivir. De clima apacible durante todo el año, posee inviernos suaves y veranos muy calurosos.
Dispone de un importante patrimonio monumental, pudiendo destacar la iglesia de Santa María la Mayor, del siglo XV, el convento de las Concepcionistas, de estilo renacentista, y la iglesia de Santa María de la Oliva, del XIII. El Cabildo y la casa de Postas son las principales construcciones civiles que pueden visitarse.
En el Museo Tesoro Parroquial es posible apreciar una colección completa de libros corales correspondientes a los siglos XV-XVIII, así como ornamentos y tallas de la iglesia.
La ermita de Nuestra Señora del Castillo es un templo que está dividido en tres naves que, al mismo tiempo, dispone de arcos de herradura apuntados con alfiz y arco triunfal ojival.
Por su parte, la Ermita de San Benito, de estilo mudéjar, fue construida en el siglo XV aunque luego fue ampliada al construirse posteriormente la sacristía, el claustro y las habitaciones. Posee una sola nave, una bóveda principal decorada con lacería y tres arcos que cubren el pórtico de la entrada principal.
Continuando con las construcciones religiosas, encontramos la Iglesia de Santa María de la Oliva, una edificación que combina a la perfección los estilos árabe, gótico y renacentista. Tiene una torre de estilo barroco, tres naves con pilares y arcos de herradura apuntados. En el retablo mayor se puede apreciar la imagen de la Virgen de la Oliva, obra que ha sido atribuida al escultor Alonso Cano.
Una zona que vale la pena visitar es la comprendida por el cerro del Castillo, sitio en el cual se han hallado numerosos restos arqueológicos pertenecientes a diversas épocas. Según cuenta la historia, en esta área existió un castillo, el mismo que hoy da nombre a la zona.