Almería, capital de la provincia homónima, es una bella ciudad que atesora monumentos emblemáticos, como la Alcazaba y la Catedral. Aunque, además dispone de hermosas playas y paraísos naturales para descansar, así como una variada agenda festiva y cultural.
La Alcazaba de Almería, que conserva siglos de historia, es una fortaleza musulmana que poseía tres recintos de interés: una zona militar y de refugio para la población en caso de invasiones; instalaciones palatinas y el recinto que fue construido a pedido de los Reyes Católicos después de la conquista cristiana.
Cada zona de la ciudad posee su encanto. Según se cree, el barrio musulmán La Chanca fue el origen de la ciudad.
La Catedral, más allá de ser un espacio de culto también era destinada a la defensa de Almería ante los ataques de los piratas berberiscos.
Al mismo tiempo, Almería se destaca por sus distintas playas, galardonadas con la Bandera Azul, urbanas o alejadas del centro para aquellos que desean mayor tranquilidad. Puede decirse que las hay para todos los gustos.
Entre las urbanas, sobresalen las playas de San Miguel – Zapillo, de arena oscura y aguas tranquilas, totalmente equipadas y con todos los servicios, como alquiler de sombrillas, puerto deportivo, paseo marítimo, etc. Las playas Costacabana, de El Toyo y de Retamar, son también una buena opción para disfrutar del sol.
Para los que prefieren algo más tranquilo, están las playas de la Almadraba y de la Fabriquilla, situadas en el Parque Natural Marítimo Terrestre Cabo de Gata-Níjar; Las Olas, de arena oscura y aguas tranquilas, La Garrofa, desde donde es posible apreciar estupendas vistas del golfo de Almería; y la playa San Telmo, localizada en los alrededores del Puerto Deportivo y del Castillo de San Telmo.
No hace falta aclarar que Almería es una ciudad mágica y realmente imperdible que merece ser disfrutada. ¡Viaja a Almería y prepárate para vivir una experiencia inolvidable!