Alaró es un municipio balear de singular belleza, que dispone de numerosos atractivos turísticos para descubrir.
En relación a la arqueología en las Islas Baleares, es posible encontrar diversos monumentos, muchos de ellos edificados desde hace más de 3.000 años. Los hallazgos, como el de la Cueva de Son Pere Antoni, posibilitan apreciar sepulcros megalíticos, navetas, talayotes y cuevas de enterramiento, constituyendo un verdadero museo al aire libre, algunos de difícil acceso. Las cuevas artificiales representan el monumento más antiguo que se conserva en las islas. Poseen entre cinco y diez metros de ancho y cerca de dos metros de alto.
Los poblados talayóticos se encuentran articulados por calles y plazas, que permiten la circulación, la defensa y el aprovechamiento del suelo. Se pueden encontrar los Restos Prehistóricos de So n’Antelm, cuya estructura se completa con almacenes, talleres, mercados, corrales, y establos, además de sistemas de regadío.
Del patrimonio arquitectónico, sobresale el Castillo fortificado de Alaró, una construcción de carácter cristiana, en donde también permite apreciar las ruinas musulmanas que se sitúan en la cima de la montaña, dándole un toque único al paisaje de la villa.
En la Colina Fortificada de Can Sec, es posible contemplar los restos de poblamientos amurallados, conformados por recintos de gruesos muros de piedra, con pequeñas torres en las esquinas. Dichos asentamientos, se extendieron por todas las islas del archipiélago.
Las islas Baleares dispusieron, en su momento, de un complejo sistema defensivo, integrado principalmente por torres-atalayas, que se levantaron cerca de la costa, como es el caso de la Torre de la Antigua Fábrica de Electricidad. Posteriormente, entre los siglos XV y XVIII, se construyeron otra clase de torres defensivas, que estaban por lo general adosadas a una casa y que son conocidas bajo el nombre de torre predial
La Sierra Tramuntana es un imponente espacio natural que alberga las mayores cumbres de la isla. Su característico microclima, con un alto nivel de humedad, y los periódicos torrentes de agua dulce dan lugar a una vegetación europea. En el área protegida de la sierra de Tramuntana se ubica la mayor proporción de los encinares de las islas Baleares.